ÁNGEL M. GREGORIS.- El cuidado de las heridas es una de las principales funciones de las enfermeras y enfermeros en centros de salud, hospitales, centros sociosanitarios… Realizar la cura de manera correcta beneficia enormemente al paciente y mejora su calidad de vida, evitando posibles infecciones. Consciente de esta realidad, Mª José González, enfermera interna residente de Familiar y Comunitaria en el centro de salud de Aldea Moret en Cáceres, ha realizado un estudio observacional para constatar qué resultados se obtienen llevando a cabo buenas prácticas en el manejo de las heridas.
“Me pregunté si se podía disminuir la incidencia de infección en las heridas con estrategias de prevención y formación. Muchas veces nos encontramos con carros llenos de material, sin orden, materiales abiertos, tapones perdidos… Decidimos realizar un estudio llevando a cabo buenas prácticas y vimos que, utilizando una técnica aséptica, como realizar la cura de forma estéril, higiene de manos, recorte de apósitos con tijera estéril, sellando bien cada apósito, orden en el carro de curas, mesa auxiliar para colocar todo lo necesario y desecho de técnicas sin evidencia, se obtienen beneficios en la cicatrización, evitando así la infección”, subraya González.
Medidas fáciles
La enfermera considera que son medidas fáciles de llevar a la práctica y muy económicas a nivel de gestión que ayudan enormemente en el manejo de las heridas y la reducción de la infección nosocomial. “Me sorprende que encontré muy pocos estudios acerca de la incidencia total de infecciones nosocomiales e infección en las heridas. Esto puede ser debido a que investigar en prevenir no es rentable para quien financia los estudios, que muchas veces están respaldados por intereses económicos”, apunta.
Además, resalta que deben ser las enfermeras quienes lideren este tipo de trabajos “para mejorar la calidad de vida de los pacientes porque estas medidas son eficaces y fáciles de llevar a la práctica y porque hay que dejar atrás el trabajar por costumbres para trabajar con evidencia”.
El trabajo “Infecciones nosocomiales en heridas: Evidencia, Factibilidad y Conocimiento” ha logrado el premio al mejor póster en el II Congreso Internacional “Las Edades de las Heridas: de la teoría a la práctica”.